jueves, 6 de octubre de 2011

-SE FUE UN GRANDE-MURIO STEVE JOBS-


-STEVE JOBS-EL CO-FUNDADOR DE APPLE-
-"EL MUNDO ES INCOMPARABLEMENTE MEJOR POR STEVE JOBS"-

-FILEALIEN-46-Año 2-Rosario-Argentina-Octubre/6/2011-Hs:19.30 Pm-
Emocionante despedida a Steve Jobs le hace la revistaWired, la publicación más prestigiosa en temas tecnológicos e informáticos del mundo, que a continuación traducimos para nuestros lectores:

"Steven Paul Jobs, de 56 años, murió el miércoles en su casa con su familia. El co-fundador y, hasta el pasado mes de agosto, CEO de Apple Inc era la persona más famosa en el sector tecnológico y de los negocios del planeta. Nadie parece estar en desacuerdo con la declaración oficial de Apple: "El mundo es incomparablemente mejor por Steve".

Le tomo un tiempo al mundo darse cuenta el increíble tesoro que era Steve Jobs. Sin embargo,Jobs lo supo todo el tiempo. Eso era parte de lo que lo hacía tan inusual. Ya desde la adolescencia Jobs demostró un descaro monstruoso. A los 13 años, llamó al responsable de HP y lo engatusó para obtener chips de computadora gratis. Era parte de un patrón vitalicio para la creación y el cumplimiento de estándares astronómicos. A lo largo de su carrera, no exhibió miedo en sus demandas. Pateó la mesa donde los demás tuvieron que negociar y atacó directa y descaradamente exclusivamente lo que él quería. Cuando conseguía lo que quería -algo que ocurría con asombrosa frecuencia- lo aceptaba como su derecho innato..

Si Jobs no eran tan talentoso, si no fuese tan visionario, si no fuese tan astuto para determinar donde otros habían fracasado en la producción de grandes productos y lo que era necesario para tener éxito, su empuje y arrogancia habrían sido objeto de burla.

Pero Steve Jobs fue tan visionario, talentoso y determinado. Combinó una comprensión innata de la tecnología con un sentido casi sobrenatural de lo que los clientes querían. Su convicción de que el diseño debe ser un elemento central en sus productos no sólo produjeron éxitos en el mercado sino que elevó en general el diseño como concepto, no sólo en la electrónica, sino de todo lo que aspira a la gama alta del consumo..

Como niño de los años sesenta que fue criado en Sillicon Valley, su carrera fusionó las dos corrientes de un modo que llamó a repensar el negocio. Y lo hizo como si no le importara un comino a quien molestase.Podía intimidar a subordinados y a gigantes corporativos con igual desprecio. Pero cuando se decidía por el encanto, era casi irresistible. Su amigo, Heidi Roizen, una vez le dio un consejo a un nuevo empleado de Apple de que la única manera de evitar caer presa de los ataques doble de veneno y encanto a cualquier hora era simplemente no contestar el teléfono. Eso no funcionó. Jobs vivía a pocas cuadras del empleado y golpeaba la puerta insistentemente hasta lograr su objetivo.

Durante la mayor parte de sus 56 años, Steve Jobs, golpeó muchas puertas, pero en la última docena de años muy pocos le estaban cerradas. Él era el más adorado y admirado hombre de negocios del planeta, tal vez de la historia. Presidentes y estrellas de rock se acercaban a verlo. Sus fans esperaron toda la noche para poder acceder a sus famosos discursos conocidos como "Stevenotes" en Macworld, casi levitando con la anticipación de lo que Jobs podría decir. Incluso se resaltaban sus pecadillos y su lado oscuro.

Sus logros eran inigualables. Las personas que pueden reclamar crédito por haber cambiado las reglas del juego en ciertos productos -invenciones icónicas que se incorporan a la cultura y en el futuro a juegos de preguntas y respuestas del estilo de Jeopardy- son pocas y poco frecuentes. Sin embargo, Jobs no ha tenido 1, ni 2, sino 6 de estos avances revolucionarios, con cualquiera de ellos siendo suficiente para una constituir una carrera magnífica. En orden: el Apple II, el Macintosh, el estudio de cine Pixar, el iPod, el iPhone y el Ipad (esto sin incluir las consistentes y brillantes mejoras para el sistema operativo Macintosh, o el gigante Apple Store). Si hubiese vivido un par de años más, sin duda habría muchos más.

Detrás de cualquier ser humano hay un misterio: ¿Qué pasó para que él ... sea él? Al considerar a personar extraordinarias, la pregunta se convierte en una obsesión. ¿Qué produce este tipo de personas capaces de crear productos que cambian el mundo, inspiran con el ejemplo y sorprenden por una audacia justificada, impregnando a miles de millones de mentes con un graffiti mnemotécnico? ¿Qué lo llevó a su sentido del producto integral, a su confianza altiva, a su capacidad para simultáneamente exigir e inspirar a la gente a hacer su mejor trabajo?

Su reserva genética era fascinante. Sus padres biológicos fueron Abdulfattah John Jandali, un inmigrante sirio, y una estudiante graduada llamada Joanne Simpson. Soltera cuando su hijo nació el 24 de febrero de 1955, Simpson le dio en adopción. Más tarde se casó y Jandali tuvo otro hijo, la premiada novelistaMona Simpson. Jobs creció en un suburbio de clase media con 2 padres amorosos, Paul y Clara Jobs. Tuvo una hermana, Patti, quien le sobrevive. A pesar de que hizo un exitoso esfuerzo por encontrar a su madre biológica, no parecía aceptar la teoría de que su empuje se debía a una reacción inconsciente a un rechazo de origen. Él siempre habló muy bien de la familia que lo crió. "Yo crecí en una época en que todos éramos bien educados en escuelas públicas, un tiempo de paz y estabilidad hasta que la guerra de Vietnam comenzó en los años sesenta", dijo.

Las turbulencias de los años sesenta también fue parte de su maquillaje. "Queríamos experimentar de la manera más rica el porque estábamos vivos", dijo de su generación, "no sólo lograr una vida mejor, y por eso la gente fue en busca de cosas. La primera gran cosa que descubrimos fue que definitivamente había más de la vida que el materialismo de la década del 50 y principios de los 60. Íbamos en busca de algo más profundo".

Fue a Reed, una reconocida escuela de artes liberales conocida por ser un paraíso hippie, pero abandonó tras su primer semestre, y optó por asistir como oyente informal a los cursos que efectivamente le interesaban (incluida una clase de caligrafía que le vendría muy bien en los años venideros). Jobs también tomó LSD en esos años, y diría que esas experiencias le afectaron sus puntos de vistas de forma permanente y positiva. Después de abandonar Oregon, viajó a la India. Todas estas experiencias tuvieron un efecto en la forma en que veía el mundo -y en la forma en que haría que sus productos cambien ese mundo.

Jobs por lo general tenía poco interés en el autoanálisis público, pero de vez dejaba caer una pista acerca de lo que lo movía. Alguna vez ha recordado los largos veranos de su juventud. “Soy un gran creyente en el aburrimiento", dijo. “El aburrimiento le permite a uno disfrutar de la curiosidad”, explicó, y "de la curiosidad viene todo”. El hombre que popularizó las computadoras personales y los teléfonos inteligentes –aparatos que llaman nuestra atención como una llama atrae a los mosquitos- estaba preocupado por el futuro del aburrimiento. "Toda esta tecnología es maravillosa, pero no tener nada que hacer puede ser maravilloso también".

En una entrevista otorgada en 1995 al Smithsonian, Jobs contó cómo aprendió a leer antes de llegar a la escuela -eso y perseguir mariposas era su pasión-. La escuela fue un shock para él. “Me encontré con un tipo de autoridad diferente de lo que había encontrado anteriormente, y no me gustó", dijo. Su propio relato cuenta como se convirtió en un elemento perturbador. Sólo el ministerio de un sabio maestro de cuarto grado -que lo acercó a aprender con sobornos y luego le sedujo con proyectos fascinantes- puso reavivar su amor por el aprendizaje.

Mientras tanto, su padre, Paul -un maquinista que nunca había completado la escuela secundaria- había hecho un poco de sitio en su terminal de trabajo para Steve donde le enseñó cómo construir cosas, desmontarlas, y volverlas a montar. De vecinos que trabajaban en las empresas de electrónica del Valle (Sillicon Valley) aprendió la temática (incluyendo que las cosas como los aparatos de televisión no eran cosas mágicas que aparecían en las casas sino que eran objetos diseñados por seres humanos y creados con mucho esmero. "Me dio un tremendo sentimiento de confianza en mi mismo aprender que a través de la exploración y el aprendizaje se podían entender cosas que parecen muy complejos", dijo al entrevistador del Smithsonian.

Después de su llamada a Packard, Jobs trabajó en HP cuando era adolescente. Más adelante tendría un puesto en Atari, cuando la compañía de videojuegos recién comenzaba. Sin embargo, no vio allí algo que satisfaga sus impulsos artísticos. "La electrónica era algo a lo que siempre podía recurrir cuando necesitaba comida en la mesa", dijo una vez.

Eso cambió cuando Steve Jobs vio lo que un compañero de escuela, Steve Wozniak, estaba haciendo. Wozniak era miembro del Homebrew Computer Club, un grupo de ingenieros de Sillicon Valley y “free riders” emocionados ante la perspectiva que ofrecían las computadoras personales con la llegada de los chips de bajo costo y la electrónica. "Woz", era uno de varios del grupo que diseñaba los suyos propios, pero no tenía ningún deseo de comercializar su proyecto, a pesar de ser revolucionario en su simplicidad y uno de los primeros en incluir gráficos en color.

Cuando Jobs vio el proyecto de su amigo, quiso hacer negocios. Mientras que otros desde sus casas también estaban comenzando sus empresas, Jobs fue único al comprender que las computadoras personales tenían el potencial de atraer a una audiencia más allá de los geeks de rigor.

"Si usted ve a los diseñadores de computadoras como artistas, hacen realmente una forma de arte de algo que puede ser producido en masa, como los discos o las impresiones, mas que algo propio de las bellas artes", dijo en 1983. "Quieren algo que les permita expresarse frente a un gran número de personas a través de su medio, y su medio es la tecnología y la fabricación". Más tarde perfeccionaría este punto de vista al hablar de Apple como una mezcla de ingeniería y artes liberales.

La manifestación más visible de esto lo constituye el caso de la elegante caja que albergaba a la Apple II.Jobs le pagó a un diseñador industrial en ciernes llamado Jerry Manock la suma de US$ 1.500 por diseñar una caja de plástico de color beige. (Manock quería ser pagado por adelantado, ya que, según le dijo el autor Michael Moritz, "eran clientes de aspecto dudoso y yo no sabía si iban a estar disponibles al momento del pago”. Jobs lo convenció de que esperase para cobrar).

"Me habló de los precios que estaba recibiendo por las partes y que eran mejores que los precios que HP estaba pagando", dijo su amigo Alan Baum. Jobs se ocuparía de estos negocios mientras que Woz y un pequeño equipo de ingenieros adolescentes trabajaba en el garaje de la familia de Jobs. De vez en cuando Jobs se pegaría una vuelta e impondría sus puntos de vista sobre el proyecto. "Nos hacía conocer su opinión, que era su gran talento, acerca de los teclados, el diseño de la caja, el logo, que partes había que comprar, cómo diseñar la placa de circuitos para que se viese bien, la disposición de las partes, los contratos a celebrar ... todo ", dijo Chris Espinosa, un integrante del grupo original. Otra cosa que logró Jobs fue convencer a Wozniak a dejar su trabajo en HP para trabajar a tiempo completo para Apple. Ante la objeción original de Woz, Jobs llamó a todos sus amigos y familiares, poniendo mucha presión sobre el ingeniero hasta que este finalmente capituló. Una vez más, Jobs había conseguido lo que quería.

Jobs le dio mucha consideración al tipo de empresa que quería que sea Apple -una vez me dijo que su deseo era crear "una compañía de US$ 10 mil millones que no perdiese su alma".Llamaba a los principales directores ejecutivos de Silicon Valley -Andy Grove , Jerry Sanders- y les preguntaba si lo invitaban a comer para poder “taladrarles las cabezas”. Más tarde se dio cuenta de que él y Woz eran objeto de curiosidad porque eran muy jóvenes. "Pero no pensamos en nosotros mismos como jugadores jóvenes", dijo. "No teníamos mucho tiempo para filosofar", continuó. "Trabajábamos 18 horas al día, 7 días a la semana, divirtiéndonos".

La Apple II fue un éxito, como lo fue la empresa. Pero a diferencia de Bill Gates, que fundó Microsoft por la misma época, Jobs no administraba Apple. Al darse cuenta de que su empresa podría ir más lejos si se contaba con un administrador profesional en vez de un niñato de 22 años de edad, con barba al estilo Fidel y una personalidad abrasiva, Apple contrató a un director ejecutivo para hacer jugar un cierto rol de supervisión adulta. En los años que siguieron, Apple se convirtió en la compañía mas popular en la pequeña parcela de las computadores personales, y el 12 de diciembre de 1980, Apple realizó una oferta pública inicial de sus acciones. Era muy raro que una compañía tan joven lo hiciese, pero resultó ser la más grande del sector hasta que IBM hizo lo propio a finales de 1981.

A medida que Apple crecía, Job parecía un poco a la deriva. "La pregunta era:¿Cómo hago para influir en Apple?'", explicó en 1983. "Bueno, puedo correr por ahí diciéndole cosas a la gente todo el día, pero eso no va a dar lugar a lo que realmente quiero. Así que pensé que una buena manera de influir en Apple sería por ejemplo: ser un gerente general aquí en Apple".

En 1979, como parte de los esfuerzos para desarrollar una máquina más avanzada, llamada Lisa, Jobs dirigió un equipo de ingenieros en una excursión a Xerox PARC. Más tarde lo describió como un Apocalipsis. Declaró inmediatamente que los principios de la Xerox Star – un mouse que impulsaba la navegación, ventanas, archivos y carpetas en pantalla, etc.- se integrasen en Lisa, un esfuerzo que disparó el costo de la máquina casi en 5 veces. Pero el estilo de gestión de Jobs consistentemente ofendía al equipo de Lisa y se buscó a otro grupo de expertos dentro de la compañía para liderar. Encontró lo que buscaba en un proyecto dirigido por un talentoso científico informático llamado JefRaskin. Su pequeño equipo estaba trabajando en una computadora de bajo costo que se llamaría Macintosh. "Cuando Steve comenzó a venir más seguido, el sueño de Jef fue destruido en el acto", dijoJoanna Hoffman, miembro del equipo Mac.

La Macintosh fue un punto de inflexión para Jobs, preocupado por ser catalogado como el hombre que fundó Apple, pero no mucho más. Jobs era un líder implacable, incluso castigador. Pero su pasión le ganó la lealtad de un equipo joven y pequeño. Les animó a pensarse a sí mismos como rebeldes. "Es mejor ser pirata que unirse a la Marina", les dijo. Una bandera con una calavera y 2 huesos cruzados flameaba en su edificio de oficinas.

Mientras que el proyecto Lisa fue inspirado en “la interfaz gráfica de usuario" de Xerox, la Macintosh fue un paso más allá. Funcionaba con una simplicidad aún mayor, era más rápida, y tenía una forma distintiva inspirada en el procesador de alimentos Cuisinart, un aparato que Jobs admiraba. Entrevistado Jobs acerca de la Macintosh en noviembre de 1983, explicó que si bien el equipo de Lisa quería hacer algo grande "la gente de Mac quieren hacer algo increíblemente grande".

Durante la entrevista se le pidió a Jobs una explicación sobre el por qué de sus ocasionales duras evaluaciones, incluso groseras, respecto del trabajo de sus empleados. (Aunque en algunos aspectos, Jobs se suavizó más adelante en la vida, las contundentes críticas se convirtieron en marca registrada). "Tenemos un entorno donde la excelencia es algo muy esperado", dijo. "Lo que es realmente bueno es reconocer y señalar cuando [el trabajo] no está muy bien hecho. Mi mejor contribución es no contentarme con cualquier cosa sino tan solo con lo que es bueno de verdad, en todos sus detalles. Ese es mi trabajo -hacer que todo este bien". A pesar de que Jobs le hizo la vida imposible a más de un ingeniero joven y brillante del equipo Mac, por lo general, estos suelen referirse a la experiencia como el punto máximo de sus carreras profesionales, un momento mágico. Y, en efecto, la experiencia Macintosh proporciona una plantilla cultural para muchos emprendimientos startup.

El 24 de enero de 1984, Jobs dio a conocer públicamente la Macintosh. Una noche antes, un anuncio espectacular y cinematográfico de Super Bowl azoró a la nación, en los que muchos consideran el mejor comercial de la historia. La Mac era una sensación. También consolidó a Jobs como una figura nacional, con apariciones principales en la revista Newsweek y Rolling Stone. (A pesar de que estaba decepcionado de que la revista Rolling Stone no lo pusiese en la portada. Jobs llamó al editorJann Wenner para defender su caso. Wenner le dijo: "No contenga la respiración" a lo que respondió 'Está bien, pero usted debería pensar en esto un poco más". En lo sucesivo, las demandas de Jobs para aparecer en portada serían mas gustosamente acomodadas.

La Macintosh fue, probablemente, la computadora personal más importante de la historia. Se introdujo un estilo de computación que persistió durante décadas (por desgracia para Apple, la mayoría de las personas experimentan la interfaz gráfica del usuario a través de equipos con Microsoft Windows, no en Macintosh.)Hizo sexy a las computadoras.

Pero el Mac inicialmente no se vendió tan bien como se esperaba. Este fracaso, así como deficiencias de la gestión de Jobs, puso a Jobs en peligro en la misma compañía que él fundó. Durante varias semanas, mantuvo una batalla tras bambalinas con John Sculley, ex CEO de Pepsi que él había reclutado personalmente para conducir Apple en 1983. (Jobs había famosamente desafiado a Sculley con la pregunta "¿De verdad quieres vender agua azucarada el resto de tu vida?") Pero Sculley fue más hábil que Jobs en ganarse el respaldo de la junta de administración. Y el 31 de mayo de 1985, despidió a Steve Jobs.

El despido fue catártico para Jobs. "Es probable que hayan recibido algún puñetazo en el estómago y el golpe le saca el aire y no puede respirar. Así es como me sentía", le dijo oportunamente a Newsweek . Sin embargo, recuperó su aliento cuando fundó su próximo emprendimiento, Next, una empresa que diseñaba y vendía estaciones de trabajo de próxima generación. La computadora de Next,, un impresionante cubo de color negro azabache, nunca prendió con los consumidores (si bien Tim Berners-Lee escribiría el código de la World Wide Web en una de esas maquinas), pero su innovador sistema operativo resultó ser de un valor duradero, y Jobs mantuvo viva a la empresa como proveedora de software.

Durante esos años, Jobs formó una segunda empresa, además de Next. Un estudio de animación gráfica en crecimiento fundado por George Lucas estaba buscando un caballero blanco, y Steve Jobs aceptó el papel. Se llamaría Pixar. Bajo la dirección de Jobs, Pixar pasó de ser una compañía de software a un estudio de cine. Se produjo el primer largometraje animado por computadora, "Toy Story", la primera de una serie de monstruos que golpearían fuerte en el estudio.

Conducir Pixar fue un paso en la creciente madurez de Jobs. Fue lo suficientemente sabio como para centrarse en las negociaciones contractuales y dejar la creatividad cineasta a los especialistas como el director John Lassiter. Adquirió también una valiosa experiencia en Hollywood. Con el tiempo, vendió Pixar a Disney por US$ 7,4 mil millones en 2006.

Pero fue la otra empresa, Next, la que llevó a Jobs de regreso a la compañía que él cofundó. Apple necesitaba un poderoso sistema operativo, y Nect podría proporcionárselo. Apple compró Next pero sus problemas sólo se profundizaron. La gente estaba escribiendo obituarios corporativos de la compañía. En 1997, la junta directiva despidió al CEO Gil Amelio y apuntalo a uno de sus fundadores para revitalizar la compañía. Una de las primeras cosas que hizo fue forjar un acuerdo con el archirrival de Apple, Microsoft.

Mientras que Jobs declaró enfáticamente que él sólo cumplía un papel de relleno provisional en Apple -"Espero que podamos encontrar un excelente CEO mañana", decía por aquel agosto- la realidad es que lideró la compañía con tanto entusiasmo que no fue una sorpresa que le quitase la minúscula "i "de su título iCEO en 2000 (por “interino”). Para entonces, la rentabilidad había vuelto a Apple.

Un punto de inflexión fue la introducción del iMac en mayo de 1998. Casi 1 año después de tomar el control de Apple, Jobs presentó su primer gran proyecto donde previamente hizo un seguimiento de cada detalle. (Se vetó el sonido de un clarinete en una banda sonora de un clip de vídeo porque sonaba "demasiado sintético"). Cuando un empleado le mostró un trabajo, le dijo simplemente: "Esto es una 'D" (una reprobación) y se alejó . Sin embargo, en el lanzamiento propiamente dicho, era la imagen del aplomo personalizado.

El iMac fue un gran éxito, una máquina todo-en-uno que enviaba el mensaje de que la sencillez, la belleza y el poder marcarían el regreso de Apple. También simplificó la línea de productos de Apple a cuatro equipos -versiones para el hogar y profesionales de sus computadoras de escritorio y portátiles. "El enfoque no significa decir que sí, significa decir que no", explicó. "Yo era papá. Y eso fue duro".

Pero con cada iteración de las computadoras, Apple iba ganando adeptos. La única excepción fue la presentación de Jobs de una máquina sin monitor llamada “Cube”. Fue quizás el equipo más hermoso. Pero en este caso, Jobs dejó que sus instintos estéticos abrumasen el sentido del mercado. Fue un fracaso excepcional.

En el año 2000, explicó cómo los competidores aún no entendían la mezcla de Apple de arte y ciencia. "Cuando la gente ve un iMac, piensan que el diseño es realmente hermoso, pero la mayoría de la gente no entiende que no se trata sólo de piel ", dijo. "Hay una razón por la cual, después de 2 años, la gente no ha sido capaz de copiar el iMac. No es sólo la superficie. La razón por la que la iMac no tiene un ventilador es una cuestión de ingeniería. Se requirió mucha ingeniería y eso es aplicable para el Cube y para todo lo demás".

En octubre de 2001, Apple presentó un reproductor de música, el iPod. Se abrió camino como el primer reproductor exitoso de música digital de bolsillo. Debido a que Jobs tenía una enorme capacidad para localizar y contratar talentos brillantes, su equipo lo produjo en menos de un año. El proceso es indicativo de la manera en que corre Apple. Aunque Jobs podía ser abrumador para imponer su punto, entendía que en última instancia, sus productos no funcionarían si las mejores ideas eran descartadas. En el caso del iPod, el hardware del diseñador Tony Fadell sabía cómo lograr que su mejor prototipo sea aprobado por Jobs -le mostró a su jefe 3 diseños diferentes, uno claramente superior al resto, para darle a Jobs la oportunidad de reprender 2 esfuerzos antes de decir: "¡Eso es más parecido a lo que queremos!".

A veces, Jobs se atrincheraba y sólo aflojaba cuando el mercado le hablaba. Una vez más, el iPod es un ejemplo. Al principio, creía que el iPod sólo debía trabajar con los Macintosh. Sin embargo, su instantánea popularidad le llevó a estar de acuerdo con algunos de sus empleados que habían presionado por una versión para Windows. Cuando el iPod se puso a disposición de la población en general, este realmente despegó. Apple ha vendido más de 300 millones de iPods.

"Si hubo alguna vez existiera un producto que catalizará lo que Apple realmente puede ser, es este", dijo Jobs respecto al iPod "ya que combina la increíble base tecnológica de Apple con la legendaria facilidad de uso de Apple con el impresionante diseño de Apple... es como, esto es lo que hacemos. Así que si alguien se pregunta por qué Apple está en este mundo, le mostraría esto como un buen ejemplo".

Es más, para apoyar el iPod, Jobs lanzó la tienda de música iTunes, el primer servicio de venta legal de música a través de Internet con éxito. Aunque las discográficas tenían fama de conservadores sobre este tipo de acuerdos, "Básicamente confiaron en nosotros y hemos negociado un acuerdo marco histórico", dijo Jobs. La tienda iTunes vendería miles de millones de canciones descargables.

El iPod fue otro punto de inflexión para Apple y Jobs. Los competidores no han aún descubierto la manera de superarlo. Cada año, saldría con una nueva versión..Un año dejó de vender el modelo más popular, el iPod mini, y lo reemplazó con un modelo totalmente nuevo llamado Nano. La línea de productos se exhibiría sobre una mesa. Hablaría entonces acerca del color que más le gustaba. A menudo, levantaría uno y preguntaría “¿No es esto asombroso?”

Esto lo satisfacía profundamente porque Jobs amaba la música. Sus héroes eran Bob Dylan y los Beatles. Preguntado en una ocasión si su sueño era conseguir que Paul McCartney cantase en vivo las canciones que a menudo cerraban sus discursos respondió jocosamente "Mi sueño es traer a John Lennon".

Mientras que Jobs se deleitaba en el centro de la atención profesional, era más cauto sobre su vida privada. Desconfiaba de la mayoría de los periodistas, desde que en 1982 la revista Time se burlase de sus pretensiones y expusieses su lado más oscuro. Jobs, que pensaba que Time lo haría “hombre del año” (eligieron a la "computadora personal" en su lugar) fue herido. "No me importa si la gente no me quiere", dijo a finales de 1983. "Bueno, puede que un poco... pero lo que realmente sí me molesta es cuando alguien utiliza su posición en Time para contarle a 10 millones de personas que no les gusto. Yo sé lo que es tener la vida privada pintada de la peor manera posible frente a un montón de gente". Veinte años después, todavía se quejaría del artículo. (El autor, Michael Moritz, más tarde se convertiría en un poderoso capitalista de riesgo, financiando a Yahoo! y a Google). Pero Jobs no quiso hacer comentarios sobre subsiguientes episodios de su vida incluyendo su negativa inicial a reconocer a su primer hijo (más tarde, aceptó la paternidad).

Jobs fue un padre orgulloso de 4 hijos, 3 de su matrimonio con Laurene Powell. Fue muy protector de ellos -cada vez que compartía una historia sobre uno de sus hijos en una entrevista, advertía que el comentario iba a ser “off the record”. (Su viuda y los 4 hijos le sobreviven). Sin embargo, claramente estaba muy orgulloso de su paternidad.

Fue en julio de 2004, cuando Steve Jobs se enteró que tenía una rara forma de cáncer pancreático. En un principio trató su enfermedad sin compartir mucho con el público. Los críticos se preguntaban si Jobs y Apple no habían violado las normas corporativas por no revelar más información. Después de lo que pareció ser un éxito inicial de la cirugía a la que se sometió, Jobs solo variaría su circunspecta postura una sola vez mas, en su discurso a los graduados de Stanford de 2005. Ese discurso, por cierto, podría ser el mejor discurso de graduación jamás pronunciado. En el diseño de computadoras, Jobs y su equipo construyeron lo que ellos mismos querían. Y ahora, pronunciaba el discurso que Steve Jobs habría querido escuchar si efectivamente se hubiese graduado de la universidad.

"Nadie quiere morir, ni siquiera la gente que quiere ir al cielo quiere morir para llegar allí", le dijo a los graduados de Stanford. "Y, sin embargo, la muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella. Y así es como debe ser, porque la muerte es muy probablemente el mejor invento de la vida. Es agente de cambio de la vida. Elimina lo viejo para dar paso a la nuevo... Vuestro tiempo es limitado, así que no lo pierdan viviendo la vida de otro".

Steve Jobs nunca hizo eso. Después de su tratamiento contra el cáncer, asumió un mayor riesgo aún en Apple -el desarrollo de un teléfono. Por supuesto, no sería sólo un teléfono móvil, sino que combinaría la astucia del Ipod como los medio de comunicación, la magia de la interfaz del Macintosh, y el estilo de diseño que lo había convertido en su marca registrada.

Al igual que con todos sus productos, Jobs era un fanático del seguimiento de todos los detalles -como también de la reacción de la prensa. Uno de los pocos periodistas que recibieron un iPhone antes de su lanzamiento recibió un llamado en su unidad de prueba de un "desconocido". Era Jobs, aparentemente queriendo saber lo que pensaba, pero en realidad lo que quería escuchar era cuan increíble le parecía. El periodista reconoció que era extraordinario, pero le comentó que tal vez no pueda igualar las expectativas que había generado. La gente lo estaba llamando el "teléfono de Jesús." ¿No le preocupa?, le preguntó. La respuesta fue no. "Vamos a superar ampliamente las expectativas", dijo.

Fue justamente lo que hizo el iPhone -en especial después de que Jobs dejase de lado su opinión inicial de que sólo un número limitado de desarrolladores podrían crear aplicaciones para él. El App Store de Apple finalmente incluye cientos de miles de programas, dándole a Apple una ventaja competitiva clave. Como se jactó el actual presidente de Apple el martes, el iPhone es el teléfono más popular del mundo.

En 2008, los observadores notaron que Jobs había perdido una cantidad alarmante de peso y parecía enfermo. La gente se preguntaba si el cáncer había vuelto a aparecer. Apple emitió un comunicado llamando a un "virus". Días después en Palo Alto, en ese período de tiempo, Jobs sacó el tema, la elaborando en detalle sobre la forma en que estaba sufriendo una enfermedad temporal no relacionada con ese tipo de cáncer. Sin embargo, continuaba adelgazando y parecía más débil, por lo que tomó una licencia.

A pesar de sus problemas de salud, Jobs mantuvo a Apple en un constante ritmo de innovación. Cuando regresó a Apple -después de un trasplante de hígado que fue reconocido sólo meses más tarde- su primera aparición fue en una presentación de iPod. "Esto no es nada", me dijo después del show. "Esperen a ver lo que viene".

Hablaba sobre el iPad, la tablet que se introdujo en abril de 2010. Con la expansión de la interfaz basada en el iPhone, Jobs logró una visión de la informática que muchos (incluyendo a su rival Microsoft) han estado intentando durante décadas. El Ipad se estableció inmediatamente como la tablet por excelencia que, como en el caso del iPod, los competidores no pueden igualar.

A principios de este año, se tomó una segunda licencia médica. Tim Cook, el asistente operativo que había sido nombrado Director de Operaciones, se convertiría en el presidente temporal. Jobs aún se mantendría involucrado en el diseño de los productos y en la dirección estratégica, pero liberado de sus responsabilidades diarias.

Jobs iba y venía de Apple como podía, en un coche a Infinity One en Cupertino, pieza central del campus que la compañía construyó a pocas cuadras donde había ido a la escuela. Tomaba el ascensor hasta el cuarto piso que incluía su oficina, un pequeño equipo de trabajo, y una gran sala de conferencias. Sin tareas diarias para llevar a cabo, sin agenda ocupada, había allí una extraña sensación de atemporalidad y tranquilidad donde continuaba ayudando a dar forma a productos aun en proceso mientras soñaba con otros nuevos.

Parecía que Jobs había llegado a un acuerdo con su destino. Pasaría tiempo con su familia y haría lo que pudiese en Apple.

En junio dio su última "Stevenote", hablando de icloud. Uno puede haber esperado que diese muchos mas. Sin embargo, el 24 de agosto, envió una nota a la junta directiva de Apple en la que expresaba que no podía reanudar sus funciones como CEO.

Aceptó el papel de presidente ejecutivo e informó que continuaría participando de las decisiones de productos y estrategias. Pero es evidente que se dirigía hacia el final que finalmente lo alcanzó este miércoles, en silencio, rodeado por la gente que lo amaba y sabiendo que muchas millones de personas que nunca le conocieron lo echarán de menos casi desesperadamente. Como les dijo a los estudiantes de Stanford:

“La muerte es muy probablemente el mejor invento de la vida. Es agente de cambio de la vida. Elimina lo viejo para dar paso a lo nuevo”.


Todo el legado de Steve Jobs no será comprendido en toda su dimensión por un tiempo muy largo. Cuando los empleados hablaban del "campo de distorsión de la realidad" de Jobs lo hacían de manera peyorativa -se referían a la forma en que llegaba a afirmar una falsa verdad por la fuerza de su convicción y su carisma. Pero en un momento determinado la mirada del mundo respecto al cerebro de Steve Jobs dejó de ser distorsionada. Se convirtió en un instrumento de profecía autocumplida.
Con la salida de producto tras producto de Apple, cada una de ellos innovadores y cambiadores de nuestro comportamiento, la visión de Steve Jobs de la realidad comenzó a hacerse realidad. Y todos vivimos en ella".

-INVESTIGACION-EDICION:ALBERTO COSTACURTA GROSSETTI Y CORRESPONSALES DE FILEALIEN- http://filealien-46.blogspot.com http://laideadedios.blogspot.com Correo de contacto: arnold462009@hotmail.com-

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